Sin que públicamente se haga referencia a la amenaza que (ficticia o no) se ha dado en redes sociales sobre supuestos ataques, el Gobierno del Estado impondrá un doble blindaje al perímetro del Centro Histórico de Morelia para la celebración del “Grito” y el desfile del 16 de septiembre.
Arcos detectares de metales, vallas para cercar la zona, cateo corporal y hasta listas para verificar nombres de “invitados especiales”, prevalecerán en torno al primer cuadro de la salud como marco a las fiestas patrias.
En la víspera , fue difundido en redes sociales el video de un supuesto líder de una organización de indígenas (Ejército Purépecha de Libertad Michoacana) en el que da un “ultimátum” a la administración de Alfredo Ramírez Bedolla tome el control, a través de la Secretaría de Seguridad Pública, de las policías de los municipios de Cotija, Tocumbo, Los Reyes, Peribán y Tingündín, bajo la advertencia de “no queremos a ningún director, subdirector o elemento coludido con la delincuencia”.
Sobre el particular no ha habido ningún comentario o señalamiento por partes de las autoridades.
Ha quedado establecido que se impondrá un “cerco blindado” para el ingreso al Centro Histórico de la capital michoacana, mismo que aplicará desde el primer minuto del 15 de septiembre.
Debe descartarse que al mediodía del 15, se tiene contemplado en el Congreso del Estado la ceremonia de apertura del segundo periodo ordinario de sesiones y toma de protesta a los integrantes del recién renovado Poder Judicial de Michoacán.
Ha quedado establecido que habrá un exhaustivo control para llegar al recinto, lo que incluye el acceso desde el cerco perimetral, cuadras antes de la sede legislativa, bajo exhaustiva lista de invitados.
En el caso de medios de comunicación, el acceso será apenas para 25 reporteros, sin que haya posibilidad, según se afirmó, de ingreso a quien no se haya registrado previamente.
