Debido a que no hay castigo para quienes vía el despojo, secuestro, amenazas y violencia, se apoderan de autotransportes del servicio público, el líder de la Delegación Michoacán de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), Arcadio Méndez, solicitó la intervención del Congreso del Estado para la derogación del llamado “robo de uso”, mediante el cual las personas se pueden apoderar de un vehículo y después devolverlo, sin que ello amerite una sanción.
Es tal el grado de impunidad que se da en Michoacán con esa situación que los transportistas ya “no pierden el tiempo” de interponer denuncias penales cuando sus choferes son despojados de las unidades de autotransporte e incluso retenidos a la fuerza.
El empresario destacó que cuando las unidades son destruidas por quema, las compañías de seguros no responden, lo que propicia pérdidas por la totalidad de costo del automotor, lo cual desde 1.5 a 3.5 millones de pesos, según las características del vehículo.
En lo que va de la presente administración estatal, puntualizó, han tenido la pérdida de tres autobuses por quema, uno en la Cañada de los Once Pueblos, otro en Zacapu y uno más en Tiripetío, mencionó.
Arcadio Méndez dijo que ante la existencia en la ley del “robo de uso”, se insiste para que los diputados la deroguen en Michoacán y se aplique una norma con las características de la federal que establece años de cárcel para quienes incurran en ese ilícito.
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